Madre que una daga de frío metal
atravesará tu corazón,
por un sufrimiento
frío
como ese metal q
vendrá
causado por nuestros pecados,
algo que ya sabías desde el momento
que te anunciaron
que ibas a concebir a Dios hombre.
Corazón de Madre
perdón, bondad, silencio.....
Aguardando el día
que sabías que llegaría.
Apoyando y acompañando
a tu hijo en el caminar,
de una vida que nos entregaría.
Tus manos de hebrea
llevando el paño
con el que limpiarás
la sangre de tu Hijo,
llevado a la cruz,
paño con el que más tarde
limpiarás tus lágrimas
causadas por un dolor desgarrador
causado por nuestras culpas.
Camino que culminará
con la alegría
de que al tercer día
tu Hijo construirá su templo,
con su Resurrección
aliviara tu dolor
y siempre estarás con nosotros,
cuando nuestro caminar se haga difícil,
en el que Tú Madre no faltarás nunca,
porque siempre nos llevarás hasta El.
NO NOS ABANDONES MADRE.
(Esto me transmite la virgen, con su atuendo de hebrea.
Felicidades.)
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